viernes, 4 de marzo de 2016

La teoría nebular ¿no explica la existencia del universo de una manera mucho más científica que los relatos que sobre la creación hace la Biblia?


PREGUNTA Nº 156:  La teoría nebular ¿no explica la existencia del universo de una manera mucho más científica que los relatos que sobre la creación hace la Biblia?

Respuesta:  La teoría nebular fue rechazada por Herber’ Spencer porque, como la Biblia, postula una Causa Primera. En resumen, la teoría es ésta: en un tiempo apareció en el espacio una masa ígnea, espontáneamente. Dentro de esa masa ardiente comenzaron a surgir corrientes también espontáneamente, y bajo el choque de esas corrientes la masa ígnea comenzó a tomar una forma esférica, girando con intensa rapidez. La fuerza centrífuga hizo que se expeliera un anillo que se desintegró, y los fragmentos, al juntarse, se convirtieron en un planeta que también comenzó a girar en torno de la masa central. De esta manera vinieron a la existencia los planetas, unos tras otros. Fueron enfriándose gradualmente, y por último quedó completo el sistema solar. Sobre uno de estos planetas, por lo menos, apareció espontáneamente la Vida o protoplasma, el que gradualmente evolucionó a través de las diferentes clases de radiados, moluscos, articulados y vertebrados, hasta florecer finalmente en el hombre, que es la inteligencia más elevada del Cosmos y señor de todas las cosas.
Esto es lo que dice el hombre de ciencia, con una sabia sonrisa, y pueden también agregar:
“¿No veis cuan simple y razonable es todo esto? Si todavía no lo veis claro, os haré una pequeña demostración”.
Entonces tomará una vasija llena de agua y echará aceite en su superficie. Así el agua representará al espacio y el aceite a la nebulosa ardiente. Luego tomará una aguja y comenzará a vibrar el aceite, imitando así las corrientes generadas en la masa ardiente, y bajo este rápido movimiento de rotación el aceite irá tomando una forma esférica.
Gradualmente la esfera se hinchará por el ecuador y surgirá un anillo que, rompiéndose, tomará a su vez la forma de un planeta y girará en torno de su fuente primaria y el hombre de ciencia os dirá entonces triunfalmente: “¿No veis, pues, cuan natural es todo ello y que no hay la menor necesidad de vuestro Dios?”
Nosotros sólo podemos admirarnos de que un hombre que ha tenido una mente capaz de concebir esta demostración espléndida pueda, al mismo tiempo, ser tan falto de percepción que no vea que él mismo está tomando el lugar de Dios, quien pensó y llevó a cabo el universo, así como el científico concibió su demostración y la llevó a cabo. Dios, mediante su poder, preserva nuestro universo y mueve los planetas, así como el hombre de ciencia mueve sus esferitas de aceite, y si Dios cesara un solo instante, el Cosmos se convertiría súbitamente en un caos conglomerado, así como el Sol de aceite y sus planetas cesan de ser
en el mismo momento en que el hombre de ciencia deja la operación.
Por consiguiente, lejos de refutar la aserción de la Biblia de que Dios es el Creador y Sustentador del Cosmos, la teoría nebular demuestra la necesidad de la interferencia divina absolutamente, y si se comprende correctamente no se encuentra la menor diferencia entre las concepciones científica y religiosa.

Max Heindel
FILOSOFÍA ROSACRUZ EN PREGUNTAS Y RESPUESTAS TOMO PRIMERO


*

No hay comentarios:

Publicar un comentario