domingo, 15 de enero de 2017

Observación Espiritual



Observación Espiritual

El autor tuvo el privilegio, mientras se encontraba bajo la dirección del instructor, de observar estas dos glándulas endógenas en acción. El momento y la oportunidad fueron preparados idealmente, actuando como sujeto una persona viva.

Ambos órganos eran muy grandes, lo que permitió una gran claridad en nuestras observaciones.

El sujeto era una mujer en estado de meditación espiritual, una mujer que había llevado una vida pura, limpia y llena de elevadas aspiraciones, cuyo alimento había consistido durante muchos años en frutas, legumbres y cereales. El cuerpo pituitario, donde se registran primero estas aspiraciones, estaba muy agrandado. El lóbulo posterior vuelto hacia atrás con su cuello en forma de embudo se agrandaba con una especie de boca que se abría en su extremidad. De esta boca abierta exudaba un gas de suave color rosado, ligeramente matizado de amarillo y azul pálidos. La columna espinal estaba llena de un éter azul pálido entremezclado de suaves tonalidades rosas y amarillas. Después de que este gas abandonaba la médula oblongada, entraba en la glándula pineal y era de un maravilloso color azul, como esas tonalidades que parecen tener las montañas después de la puesta del Sol. La glándula pineal estaba también agrandada con la punta del cono estirándose hacia el cuerpo pituitario. El minúsculo apéndice de piel extremo de la primera, que mencionamos en un capítulo anterior, se había estirado y emitía una pequeña llamita similar a la llama azul de un mechero de gas. Estos dos órganos vibraban intensamente y se estiraban uno hacia el otro sobre el tercer ventrículo: Este ventrículo es una cavidad oblonga que existe entre los tálamos ópticos. Cuando la vida del aspirante ha sido pura, este ventrículo aparece al ocultista como un horno diminuto resplandeciente de luz dorada. Es de aquí de dónde se saca la vitalidad del cuerpo.

La glándula pineal, como ya se ha indicado, tiene la apariencia de un minúsculo órgano masculino, mientras que el cuerpo pituitario, con su boca abierta, se parece a un órgano femenino. De esta manera podemos ver que la ciencia oficial, que está tratando de probar que estos órganos están directamente relacionados con las funciones del cerebro y de los órganos generadores, está en lo cierto. Tienen influencia directa sobre el ser humano desde las dos extremidades de la médula espinal, como lo demuestra el hecho de que todos los pervertidos sexuales se convierten en unos degenerados. La conservación de los fluidos vitales y la vida casta y pura fortalecen el cerebro, y entonces estas dos glándulas se agrandan, mientras que en la persona sensual se atrofian. La ciencia oficial tiene razón al afirmar que estos órganos son mayores en los niños y las mujeres que en los hombres, aunque se trate de hombres que hayan tenido una vida muy pura.

del libro Temas Rosacruces UNO 
 publicado por Estudiantes de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel


* *

No hay comentarios:

Publicar un comentario